Para todo aquel amante de lo bizarro y practicante de la autopsicología
"La cordura y la felicidad son una combinación imposible". Con esta apropiada cita de Mark Twain arrancó el primer episodio de Wilfred, la nueva comedia de FX que protagoniza Elijah Wood y acaba de completar su primera temporada.
Wood encarna el personaje de Ryan, un ex abogado miserable que se nos presenta escribiendo una carta suicida y preparándose un cocktail de pastillas que, para su mala suerte, no hará efecto. En medio de esta situación, Ryan recibe a su linda vecina Jenna (Fiona Gubelmann), que le pide que cuide a su perro, Wilfred, mientras ella no está.
Y acá es donde está lo retorcido de esta historia: mientras todo el mundo ve un perro común y corriente, Ryan ve y escucha a un hombre con acento australiano metido en un disfraz de perro (Jason Gann) que pretende darle consejos de vida.
La trama de la comedia gira alrededor de todo lo que Wilfred hace para ayudar a Ryan a encaminarse de nuevo en la vida y ser feliz, usando métodos más que bizarros. Así, teniendo como actividad primordial fumar porro y tomar cerveza, estos nuevos mejores amigos atravesarán peripecias casi siempre impulsadas por el perro, que resultarán en una epifanía distinta en cada capítulo en pos de la maduración psíquica del pobre manipulado.
Desarrollada por David Zuckerman (Los reyes de la colina, Padre de familia, American Dad), Wilfred es la adaptación de una serie australiana del mismo nombre, co-creada y protagonizada por Jason Gann, que se vuelve a calzar el disfraz de perro para acompañar a Wood en la versión norteamericana.
Ya sea una ficción filosófica, una comedia negra irreverente o, como algunos dirán, una versión de Calvin y Hobbes de adultos, lo cierto es que Wilfred no es una serie más del montón. Obtuvo el mejor rating para una primera temporada de comedia en FX y ya fue renovada para una segunda de 13 episodios, aún sin fecha de estreno.
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